Nada normal (2002)

Nueve de agosto

Cristina González Álvarez

¡Margarita! que no me vea, no tengo escapatoria ¡ay, qué pesada, por Dios! ¿qué le digo? me tiro al agua ya me ha visto ¿qué hago? ¡qué pereza! pues venga, soy muy feliz y tengo mucha prisa, hasta otro día. Diez largos a braza y cuatro a crol, no voy a aguantar, como mucho seis y cuatro, paso de largo, no puedo ser tan borde ¡ya verás, media hora hablando! sí, ya te he visto, no grites ¡qué exagerada! ¡qué sonrisa! me pones nerviosa, no me toques tanto, suéltame ¡hale! dos besos y adiós. Quiero irme, y a mí qué que tu vengas todos los días, gracias por avisar, deja de mirarme el biquini, estoy blanca, estoy gorda, ¡joder! ¿qué miras?, ¡qué miedo! la peli de ayer ¡qué mal he dormido! ¡qué pesadillas! todo el rato el asesino, qué macabro, y luego no duermo, ni que tuviera tres años. Sí, muy guapa, mentirosa, pues lo siento, a mí no sale decirte nada, mucha alegría, fenomenal ¿me dejas nadar? ¡qué pesada con el trabajo! ni que fueras la única, a mí es que en la piscina me gusta nadar, sí, me hago diez largos, me llama Jaime, pues mira, mal, Jaime no me llama desde el domingo y estoy de mal humor, pero no te lo voy a contar, así que déjame en paz, voy a nadar, le puedo escribir un mensaje, no me da la gana, ¡ay! ¿por qué no le cuentas tu vida al socorrista?, que parece aburrido, está bastante bien el socorrista, y vuelta al trabajo, como si me importara, ¡bueno, hija, no te pongas así! que yo no tengo la culpa, encima de que te aguanto, cualquiera te corta ahora, a ver si acabas y puedo nadar, las dos y cuarto ¿no te das cuenta de que he mirado el reloj?, a ti te da igual, pues lo vuelvo a mirar a ver si te enteras ¡por favor socorrista, sálvame! ¿qué haces ahí parado? que me muero, se parece un poco a Jaime, Jaime es más guapo, ¿me habrá llamado?, me hace sufrir más que el asesino, por su culpa no he dormido, ¿pero esa gente existe?, yo no vuelvo sola a casa, quiero nadar, prefiero a braza ¡con la hora que es! ¡joder, si es que tengo un hambre! y ésta que se calle ya con su jefe, que no me he enterado de nada, bueno, ahora te corto y te digo que tengo mucha prisa, venga, que estoy muy incómoda y hace calor ¡pesada!, no, si al final te dejo hablando sola, ¿y a mí qué me cuentas? pues mata a tu jefe y asunto zanjado ¡ya ves qué problema!, tercera vez que miro el reloj ¡qué descarada!, pero me da igual, venga, dos besos rapiditos y hasta otro día, que saldré corriendo al verte, bueno, mira, ahora media hora más con quedar un día de estos, ni de coña, yo me voy, sí, claro, te sigo la corriente, si no nos vamos a llamar, qué dices, como Jaime, que no llama, ¡yo que venía a nadar para relajarme! no, si al final la que te mata soy yo, te ahogo aquí mismo, peor que el asesino, y así el que no duerme es él, y el socorrista me ayuda, que es muy guapo, y luego nos vamos de copas y a Jaime ¡que le den dos duros!

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